lunes, 17 de septiembre de 2018

SOLEMNES CULTOS RELIGIOSOS EN HONOR DE LA SOLEDAD DEL PUENTE

Nuestra Hermandad daba por concluídos en la tarde de ayer con la celebración de la Misa por los Hermanos Difuntos los Cultos Religiosos que cada año celebra en el mes de septiembre para rendir honores a la Sagrada Imagen de Nuestra Señora de la Soledad (del Puente).
El Triduo celebrado durante los días 13, 14 y 15 precedían a la Solemne Función Religiosa del domingo, el día más importante de la Hermandad. Los fieles y hermanos que se acercaban hasta la Iglesia de la Virgen de la Luz para asistir a la eucaristía oficiada por el Consiliario de la Hermandad, Don Ángel García Benedicto, contemplaban a la Madre en su Altar de Cultos, un año más engalanado para la ocasión con 12 candelabros de cera natural, 6 de ellos adquiridos por nuestra Hermandad este año, otros 6 cedidos por la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno "El Pobre" de Madrid a la que agradecemos su amabilidad para poder completar el conjunto de iluminación natural, y un bonito exorno floral que realzaba la belleza de la Madre que lucía vestido de brocado y el Manto de Camarín que bordara Encarnación Román. 
Como viene siendo habitual, tras la ofrenda a los fieles, se procedía al intercambio de poderes entre los Hermanos Mayores, un acto sin duda alguna muy emotivo, pues supone el relevo entre los que han trabajado durante el último año junto a la Junta de Diputación y los que son recibidos para proseguir con esa tarea, asegurando así la buena salud nazarena de la Hermandad. La entrega de cetros e imposición de la Medalla de la Hermandad ofrecía una emotiva renovación de cargos y responsabilidad compartida bajo la protección y bendición de la Madre para todos ellos. Los Hermanos Mayores que comienzan su mandato son Fernando Soria Huerta, Ana Blanco Moya, Antonio Soria Huerta, Nuria Madrigal Blanco, Demetrio Cervera Abarca, María Priego Crespo, Carla Pérez Torralba y Andrea Blanco Soria.
Las ofrendas también se convertían en un momento especial en esta ocasión ya que, junto a la preceptiva ofrenda del pan y el vino que se convertirían en el cuerpo y sangre de nuestro Señor, la Hermandad ofrecía a la Virgen dos elementos muy significativos. Por un lado, una almohadilla, y un escudo y guantes infantiles que simbolizan el Paso Infantil que se está elaborando para los más pequeños de nuestra Hermandad para que vivan con fe la devoción por nuestra Madre de la Soledad. Por otro lado, se ofrecía un nuevo Paño Mortuorio que servirá para arropar a los Hermanos Difuntos que tras haberse mostrado ante Ella en vida, un día partirán hacia el Padre en la procesión celestial.y, una vez en el cielo, puedan ser cobijados bajo el Manto de la Madre.


La Misa oficiada el lunes por los Hermanos fallecidos cerraba estos Cultos Religiosos dando por concluido un año nazareno e iniciando otro nuevo camino repleto de ilusiones dirigido hacia la preparación en la fe y la oración, junto a los actos y actividades que la Hermandad organiza cada año junto a Ella y que tendrán su momento álgido durante la Procesión de Paz y Caridad en la tarde del Jueves Santo.


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