martes, 28 de junio de 2011

ORGULLO DE BANCERO EN EL DÍA GRANDE DE NUESTRO SEÑOR

"Para mi ha sido una experiencia muy bonita y agradezco a la Hermandad el haberme hecho participe de esta procesión y poder representarla con dignidad. Espero haber cumplido con mis obligaciones lo mejor posible", estas son las emocionadas palabras de un joven bancero de nuestra Hermandad, Ángel Escamilla Martínez, designado por la Junta de Diputación para portar la Custodia en la Procesión del Corpus Christi del pasado domingo.


La Junta de Cofradías había solicitado a las Hermandades que aportaran este año un bancero joven para homenajear a este grupo de la población que va a celebrar su Jornada de la Juventud en Madrid en el próximo mes de agosto. Angel Escamilla aceptó gustoso la invitación y con decisión y orgullo portó la Custodia en representación de nuestra Hermandad. "Mi participación creo que ha sido lo mas completa que he podido. El sábado, a eso de las 16.20 horas, estaba ya por la Catedral poniendo en andas la Custodia y cuando terminamos, nos bajamos a la Iglesia de la Virgen de la Luz a preparar el altar de cultos para el domingo dejar las andas en un lugar digno. El domingo a eso de las 9.30 estaban por la Sede de la Hermandad nuestros Hermanos para recoger los Cetros, Estandartes y el Guión y subirnos hacia la Catedral", comenta todavía ilusionado cuando acaba de volver de quitar las andas de la Custodia.


Ya en la Catedral, todos los hermanos participantes, Hermanos Mayores y Banceros fueron oportunamente colocados en los espacios reservados para después de la Santa Misa, oficiada por el Señor Obispo de Cuenca, D. José María Yangüas Sanz, empezar el Desfile. "El sol hizo justicia a la época del año en la que estamos y pasamos bastante calor. El desfile muy bien. Fue nuevo para mí lo de ir de puntal e ir tomando las curvas como las de la Audiencia y el Escardillo. La entrada a Iglesia de la Virgen de la Luz con la Custodia, mucho mas sencilla que cuando la hacemos con la Virgen de la Soledad", comenta sonriendo.


En definitiva, un desfile muy bonito, rápido, sencillo y muy bien organizado. Mucha participación de los niños que han recibido su Primera Comunión recientemente y los altares de las Hermandades preparados para este bonito día. Las Hermandades respondiendo dignamente a la presencia de nuestro Señor en la calle y el mundo nazareno de la ciudad, orgulloso, al igual que nuestro joven bancero que guardará este día como un grato recuerdo.

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